Aplicación
Sólo apta para uso externo.
Aplicar generosamente la loción en toda la superficie del pulpejo del pie.
Intervalos de aplicación
- Para perros en período de preparación para la actividad: 1 aplicación al día durante 10 a 15 días.
- Para perros durante la actividad: 2 a 3 aplicaciones por semana.
- Para perros con almohadillas sensibles: 1 ó 2 aplicaciones por semana.
La aplicación de SOLIPAT® es sencilla, práctica y rápida
- Abrir el frasco levantando la palanca del tapón.
- Elija el tipo de aplicación
- sujete la pata de su perro con una mano. Da la vuelta al frasco de SOLIPAT® y aplica una ligera presión para que la loción fluya directamente sobre la almohadilla de la pata.
- Empapar una compresa con la loción SOLIPAT® y mojar con ella las almohadillas del perro.
- Prepare un baño de pies vaciando la loción SOLIPAT® en un recipiente. Ahora coloque las patas del perro una tras otra en el recipiente. De esta forma es posible cuidar las patas de varios perros una tras otra.
- Cierre bien el envase después de usarlo.
Su veterinario puede modificar las instrucciones de uso anteriores. Siga las recomendaciones de su veterinario.
Consejos:
Sólo apto para uso externo.
Evite que su perro lama la loción de sus patas unos minutos después de la aplicación.
No utilizar sobre la piel herida.
Conservar el frasco en posición vertical a temperatura ambiente.
Los ligeros depósitos en el fondo del frasco son normales y no afectan a la calidad ni a las propiedades del producto.
La loción no debe tragarse.
Provoca quemaduras graves en la piel y lesiones oculares.
Puede causar irritación respiratoria.
Tóxico para los organismos acuáticos, con efectos nocivos duraderos.
En caso de ingestión: Enjuagar la boca. No provocar el vómito. Llamar inmediatamente al Servicio de Información Toxicológica o a un médico.
En caso de contacto con la piel: Quitarse inmediatamente toda la ropa contaminada. Lavar la piel con agua. Llevar guantes de protección.
En caso de contacto con los ojos: Lavar cuidadosamente con agua durante varios minutos. Quitarse las lentes de contacto si están presentes y son fácilmente accesibles. Continuar enjuagando.
Si persiste la irritación ocular: acúdase a un médico.
No verter en el medio ambiente.
No ingerir.
Manténgase fuera de la vista y del alcance de los niños.